viernes, 21 de mayo de 2010

Hoy lloré, lloré mucho. Desde que nombraron a Sofi por el parlante por ser escolta, al verla venir caminando por el pasillo del salón de actos ya empecé a pucherear. La vi ahí arriba del escenario estando orgullosa de ella, porque yo se que por mas de que ella decía que no quería estar ahí, se sentía bien con ella misma, y eso me hace feliz. Se desmayó Tabatar y Sofi se fue, esperamos un rato y salí del salón de actos para llevarle las cosas a Sofi porque se quería ir a la casa para estar con la madre que hoy llegaba de viaje. Le di las cosas, nos pusimos a hablar un toque ahí afuera, nos reímos un poco, nos acordamos de como reza Flor, fue buenísimo. Le preguntamos a Juan Cruz si faltaba mucho, nos dijo que no. Vimos al pequeño Gando hacer un truco de magia en el acto. Y nos sentamos en el piso del salón de actos atrás de todo. Empezó el video y a la tercera foto, con bicho de ciudad de fondo, yo ya estaba llorando, con ruidito y todo, no podía parar. Sentía un vacío unas ganas de poder frenar el tiempo, una impotencia de no poder hacer nada para quedarme ahí para siempre, con un poco del síndrome de Peter Pan deseando no crecer nunca más. Yo lloraba y Sofi me miraba y me preguntaba si estaba bien, a los dos segundos no me dice más nada, la miro y ella estaba toda llorosa. Salimos tomamos un poco de aire y volvemos a entrar, lo que significo volver a llorar. Terminó el acto y seguimos llorando, Cami tenia mis cosas en la segunda fila, donde nos habíamos sentados para poder hacerle caras a Sofi. Salimos del salón de actos para ir a buscara a Cami, al pie de la escalera con Sofi nos volvemos a poner a llorar otra vez muy desesperadamente y nos abrazamos y los nenes chiquitos nos miraban asustados. Me llama Cami y le decimos que estamos en la puerta y ella nos pide que entremos, estoy entrando al salón de actos y la veo venir por el pasillo toda cargada de cosas y bordo porque había estado llorando hasta recién. Cuando la vi la abrasé y nos pusimos a llorar juntas pero muy mal, no la podía soltar. En eso viene el flaco de la cooperadota que quería a toda costa que vaya a saludar a Oliva, seguro que se pensaba que lloraba porque lo iba a extrañar a él, cuando en realidad lloraba porque voy a extrañar el colegio con todo mi ser, porque es mi casa, m i lugar, ahí crecí y tiene guardados miles de momentos míos, muy míos donde aprendí, maduré y me reí durante estos últimos seis años. En eso viene Oliva a saludarnos y a pedirnos que no lloremos, yo seguía abrazada a Cami, Yoli me daba palmaditas en la espalda de forma cariñosa. La abrasé a Sofi que también lloraba. Leandro el preceptor nos sacaba fotos, por poco le digo que pare pero no me salían las palabras. Gustavo nos abrazo, y nos pedía que paremos de llorar como no podía parar me abrazo de nuevo y me dijo que siempre íbamos a volver al Nacio, después salimos a la galería, yo no podía dejar de temblar y nos sentamos en el piso y dejamos todas las cosas en un banco, estaba Sofi sentada en el banco y yo apoyada en sus piernas y de repente escucho un ruidito y una carcajada y Sofi riéndose nos dice, me trague el chicle y salio otra carcajada muy potente, a los dos segundos estábamos llorando de nuevo, se h izo tarde uy Sofi tenia que volverse a la casa entones empezamos bajar la escalera y cuando estaba llegando al principio emerge un nuevo llanto potente y me temblaban mucho las piernas entonces me senté en un panco al lado de donde venden los buzos y las chicas se habían ido caminando para afuera después de un ratito las alcance y fuimos para 7, Cami doblo en 3 como siempre, y con Sofi seguimos recordado cosas que pasaron en estos años y seguimos llorando. Yo se que vamos a volver al Nacio, yo se que eso es verdad pero que NUNCA va a volver a ser lo mismo, nunca voy a volver a esas horas de clase con mate y amigas y muchas risas. Nunca mas me voy a poder volver a tirar al sol en los recreos o en las horas libres, se van a acabar los mates, las optativas, los chistes, se vana terminar las peleas y los malos humores, se van a terminar las corridas por los pasillos, las charlas en los baños. Pero SIEMPRE me voy a acordar de todos los momentos que pase en el Nacio, desde séptimo en el salón de actos en las tardes de teatro los miércoles, que nos apurábamos para llegar temprano y poder ver a jota y a Fran Caselli (que en ese momento decíamos que era el novio de la corcho, que ni siquiera sabíamos que se llamaba Laura), me acuerdo cuando me puse a llorar en la clase de Marota, y que tuvimos que cantar una canción que decía algo así tipo… toma mi guitarra y dulcemente cántame con ella una canción que quiero guardar en mi memoria el lindo recuerdo de tu voz, el lindo recuerdo deee tu voooz… también me acuerdo que una vuelta habíamos escrito todos los códigos en una hojita y nos la saco Ignacio y le hicimos un cuento raro de que mis viejos se iba a separar y que el papel decía cosas que no quería que el se entere y que por favor nos lo devuelva, y nos lo devolvió sin leerlo, mas bueno Natio. Después las canciones que hacíamos con las rimas de los apellidos, la mañanas en la biblioteca. En geografía, con la tía CECI, que le decíamos pastito, cielito o pachamama, según como se venia vestida, y que a Sofi le había puesto un diez en un examen y yo pensaba que le había puesto esa nota porque era conocida de la profe, también en geografía salio lo de MAP, PEA, y un montón mas de códigos, la teoría del Big Cat. Me acuerdo que una vuelta Líbano había llevado un globo terráqueo y una lámpara que cumplía la función de sol y nosotras nos cagábamos de risa, me acuerdo también de que perseguíamos a gato por todos lados, y que decíamos que chuky era su amigo malo, y Lucas un día lo miró con una cara de culo tremendo y el se re asustó. Ay dios no puedo parar de llorar ya me canse, no escribo más… en conclusión y para cerrar, voy a extrañar muchísimo estos seis años que viví en el nacional, mucho

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